La extrema izquierda rodeará el congreso para denunciar la investidura de Mariano Rajoy
Este sábado 28 de octubre se celebrará la manifestación “Rodea el Congreso” que pretende recorrer las calles de Madrid mientras se celebra la investidura de Mariano Rajoy, candidato del Partido Popular, de Ciudadanos y -por la vía de la abstención- de parte del PSOE. En el texto de la convocatoria se cuestiona tanto “el régimen democrático” como la legitimidad del que será el nuevo presidente del Gobierno. El lema de la manifestación es “Ante el golpe de la mafia, democracia. No a la investidura ilegítima”. La manifestación, promovida entre otros por Izquierda Castellana y EH Bildu, se refiere a la investidura como un golpe del régimen actual.
Razones no les faltan para criticar a la partitocracia pero ¿qué legitimidad moral tienen realmente los convocantes para acusar a otros de golpistas?
En el cartel de la protesta aparece Mariano Rajoy vestido de mafioso y empuñando una pistola con la que acaba de disparar en la “o” de “golpe de la mafia”. La manifestación es contra Mariano Rajoy, en definitiva, aunque también incluyen en el cartel a Susana Díaz, presidenta de la Junta de Andalucía, y Felipe González, expresidente del Gobierno. Al jefe del estado, don Felipe de Borbón, no lo han representado en la publicidad de la protesta de manera violenta para evitar “delitos contra la corona”, recogidos en el Código Penal. Recordemos que el famoso “golpe de los 17 magníficos”, fue urdido presumiblemente dentro del PSOE con la colaboración de Susana Díaz y Felipe González. Gracias a la dimisión de Sánchez, el sábado se abstendrá el PSOE, a no ser que la rebelión interna continúe su curso.
Lo característico de esta izquierda neocomunista que constituye el entorno político de Podemos es que consideran que tanto el jefe del Estado como los partidos mayoritarios configuran diferentes mafias que han hecho de las instituciones su propio “patio de recreo”. La “mafia de los Nóos” incluye a don Felipe junto a la “mafia de los EREs” del PSOE y a la “mafia de la Gürtel” en el PP. El discurso de la convocatoria para este sábado hace hincapié en que se ha producido un “nuevo robo a nuestra soberanía nuestro pueblo”. También hace énfasis en que la Transición es un falso proceso político que ha conseguido que el Congreso de los Diputados esté vacío de democracia. Reclaman un proceso constituyente. El sistema democrático lo califican como “corrupto, autoritario y criminal”. El cambio global que pedirán en las calles de Madrid no está concretado en ninguna de sus facetas. El discurso antigolpista es el punto fundamental de la marcha aunque no haya propuestas concretas para cambiar la situación.
“Usted, señor Rajoy, será investido como resultado de un golpe parlamentario a raíz de la intervención de un partido político, cocinado a fuego lento durante diez interminables meses, para anular los resultados de unas elecciones”.
Alexandra Fernández, portavoz parlamentaria de En Marea
Unidos Podemos ha hecho todo lo posible para referirse a la investidura de Mariano Rajoy en el Congreso como un “motín oligárquico”, llegando a afirmar que el “golpe de los 17 magníficos” era algo urdido y cocinado también por el Partido Popular. Se le ha comparado a Mariano Rajoy con el golpista Antonio Tejero. No obstante, el apoyo a la manifestación de Unidos Podemos no es oficial, como si pretendieran estar en la procesión y repicando… y es que su sección de Anticapitalistas, partido integrado en la formación morada, ha difundido un video adhiriéndose a la marcha.
Los dirigentes de Unidos Podemos han manifestado su apoyo a la manifestación, mientras Anticapitalistas, partido integrado en Podemos, ha difundido un vídeo en el que se adhiere oficialmente a la marcha y llama a secundarla, algo que también ha hecho Izquierda Unida.
Sin embargo, Iñigo Errejón, portavoz de Unidos Podemos en el Congreso, no ha querido entrar en la dureza de calificar al Gobierno de Mariano Rajoy como ilegítimo. Contestando con ambigüedad, aseguró el pasado martes en el Congreso que “este Gobierno es un Gobierno profundamente débil que ha tenido que hacer trizas al partido de la oposición para ser investido”. “¿Esto es legal? Sí, pero entiendo que haya muchos ciudadanos que se sientan decepcionados y que digan que no votaron para esto”, añadió. Estas declaraciones ambiguas son acordes a la discusión que la dirección de Podemos ha tenido en los últimos días sobre las consecuencias de la protesta. Íñigo Errejón, advirtió el pasado miércoles de los riesgos de quedar atrapados en ese debate antigolpista y de que las demás fuerzas políticas les vinculen a la concentración, sobre todo si deriva en sucesos violentos.
Recordemos que en la primera manifestación de “Rodea el Congreso” se llegó incluso a la imputación de los organizadores. Todo terminó con el archivo del proceso. Por el momento, la protesta está avalada por el derecho de la libertad de expresión, recogido en las leyes vigentes.
En definitiva, la izquierda neocomunista, ese complemento necesario del progresismo institucionalizado que ahora encabeza Mariano Rajoy, se apresta a jugar, como en 1931, o en 1934, su baza de demagogia extraparlamentaria. Teatro de calle frente al teatro de salón. No ha venido para demoler el régimen del 78 sino para apuntalarlo.