Aunque los terroristas del Estado Islámico (ISIS) han tratado de arrasar con todo lo que encuentran a su paso en Irak, lo único que no han podido arrebatar es la fe de los cristianos, que siguen siendo una lámpara que ilumina de sus hermanos en el resto del mundo.
A finales de julio una organización francesa ha colocado en diversas aldeas de la llanura de Nínive imágenes de la Virgen de Lourdes para sustituirlas por las que fueron destruidas por el ISIS. La iniciativa surgió del P. Pascal Gollnish que reconoce que “quedó particularmente impactado por el saqueo de las iglesias y santuarios en la llanura de Nínive, por la destrucción sistemática de las cruces y al ver las imágenes decapitadas de Jesús y la Virgen María”.
Desde octubre de 2016, tras la liberación de estas llanuras en las que en el Antiguo Testamento se narra como Jonás predicó el arrepentimiento, los cristianos están volviendo a sus hogares y una de las primeras cosas que han hecho en sus hogares, iglesias y negocios destruidos ha sido “poner sus cruces, símbolos de vida, símbolos de resurrección en estos lugares”, narra el P. Pascal Gollnish.