Entrevista al autor de “Eso no estaba en mi libro de historia de Cataluña”, Javier Barraycoa
Javier Barraycoa es barcelonés, profesor universitario, sociólogo y autor de numerosas obras desmitificadoras del nacionalismo catalán. Es también cofundador de varias asociaciones culturales para combatir el supremacismo nacionalista.
Entrevista publicada en SIERRA NORTE DIGITAL.
– P.-¿Qué le ha motivado a escribir un nuevo libro sobre las historias de Cataluña y las falsificaciones del nacionalismo?
R.- Por un lado, fue una propuesta de una editorial de prestigio como Almuzara, que me tentó en este nuevo proyecto. Por otro lado, en Cataluña sigue siendo necesario un combate cultural frente al relato nacionalista. La historia está secuestrada en las facultades y ámbitos académicos y son necesarias iniciativas que sepan romper con la corrección política.
P.-¿Entonces su libro es políticamente incorrecto?
R.- Inevitablemente. Todo intento de decir la verdad sobre la historia de Cataluña es tomado como un ataque personal a los nacionalistas. Se han identificado tanto con su microrrelato que digerir la verdad histórica que contradice sus tesis se les hace insoportable.
P.-¿Podría poner algún ejemplo?
R.- Cientos. Casi se podría decir que se ha construido una historia de retazos sin orden ni concierto para que cuadre con las tesis nacionalistas. Por eso no cuadra por qué, por ejemplo, el Conde de Barcelona Ramon Berenguer III se casó en Ripoll con una hija de Cid. O por qué los Condes de Urgell rendían vasallaje al rey de León y participaron en la conquista de Extremadura. Estos datos descolocan a la versión recortada que encuentras en los libros escolares.
P.-Pero eso parecen hechos anecdóticos…
R.- Lo anecdótico es sintomático, pero ya no es tan anecdótico que, en 1627, el Rosellón enviara un Memorándum a Felipe IV pidiendo separarse de la Provincia de Cataluña debido a la corrupción más que notable de la Diputación de Barcelona que les imponía tributos injustísimos. Hoy el nacionalismo sueña con recuperar el Rosellón, pero la verdad es que cada vez que estaba en peligro de ser absorbido por los franceses, eran los soldados castellanos, junto a más escasos soldados catalanes, los que acababan salvando la situación.
P.-Respecto a otros libros aporta nuevos datos por ejemplo en torno a la sardana.
R.- Sí, ya por fin se ha reconocido que la sardana fue reinventada artificialmente por el catalanismo. Se pudo hacer gracias a Pep Ventura, hijo de militar de Gerona, pero nacido en Jaén. El nacionalismo conservador ha estado ocultando durante cien años que Pep Ventura era revolucionario y anticatalanista. Durante su juventud era revolucionario y sus primeras sardanas estaban inspiradas en zarzuelas, óperas e incluso el himno de Riego. Estas partituras han estado escondidas durante muchos años, pues el catalanismo pretendía hacernos creer que la sardana era un baile ancestral de Cataluña, pero nada más alejado de la realidad.
P.-Sabemos que es un tema recurrente pero ya nos ha acostumbrado a reconocer que la tauramaquía y Cataluña son inseparables. ¿Aporta su libro más datos nuevos?
R.- Reconozco que es un tema apasionante. Uno de los capítulos del libro se titula “La Cataluña cañí”. Y sí, he intentado aportar datos curiosos nuevos que no habían aún salido a la luz. Por ejemplo, el afrancesado y masón Godoy prohibió los toros en España para “modernizarla”. Cuando la fiesta estaba ya irremediablemente perdida, aconteció la batalla de Bailén. Un andaluz entregó su fortuna para armar lanceros en la batalla. Tras la victoria, arruinado, pidió a las Cortes de Cádiz si podía celebrar una corrida de toros para recuperar la inversión. En principio las Cortes se negaron. Pero entonces, un catalán -Antonio Capmany- tomó la palabra he hizo una defensa tan emotiva de la fiesta nacional, que las Cortes aprobaron por unanimidad restaurar los toros en España.
P.-Curioso. Pues sí, esto no suele salir en los libros de historia…
R.- En la Cataluña más profunda, en Olot (Gerona), está la Virgen de la Tura. Según la leyenda fue encontrada por un toro (un tur, que se decía en aquellos tiempos). Así empezó una tradición de corridas de toros. La primera está registrada en 1636. También en Gerona una imprenta a principios del siglo XX fue la primera en España en contratar pintores al óleo para luego hacer los carteles anunciadores de las corridas de toros. Antes se anunciaban con carteles sencillos y nada artísticos. Esta costumbre se extendió por todo el mundo y dura hasta ahora. Hubo magníficos pintores catalanes entre los mejores cartelistas taurinos.
P.-Y Cuestiones más políticas o peliagudas ¿también se tratan en el libro?
R.- Sí. Es inevitable, aunque se dan las claves principales para no agotar al lector, pues es un libro de divulgación y no académico. Por ejemplo, se analiza el papel de Rafael Casanova y se proponen solucionar varias incógnitas: ¿cómo llegó el que era meramente alcalde de Barcelona a controlar la Generalitat y el Ejército austracista? Detrás se esconde una historia de intrigas digna de una novela. También se revisa el papel de la masonería en la historia de Cataluña, o bien las manipulaciones sobre los símbolos de Cataluña como la cuatribarrada o Sant Jordi, entre otros muchos temas.
P.-O sea que el libro promete.
R.-Creo que sí. Espero que el lector no quede decepcionado y que pueda aprender infinidad de pequeñas historias que permiten rehacer la verdadera historia de Cataluña.
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Otros libros del autor los puedes encontrar en: https://www.todostuslibros.com/autor/javier-barraycoa