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Economía: Las herencias no están aún del todo a salvo en Andalucía

EP

Cumpliendo con nuestro compromiso de análisis de la actualidad, desde Ahora Información, cada miércoles, les ofreceremos un resumen con los aspectos más relevantes de la economía.

Moreno convierte Andalucía en un paraíso para las herencias (Libre Mercado)

Pregonan algunos que Andalucía “va camino de convertirse” en la región con el Impuesto de Sucesiones más bajo de España. Y es que el nuevo Gobierno de PP y C’s se ha estrenado con la aprobación de un acuerdo para reducir el Impuesto de Sucesiones, aplicado a las herencias.

La medida consiste en mantener la exención del impuesto para los patrimonios de hasta 1 millón de euros (que seguirán sin pagar nada) y a partir de ahí, bonificar al 99% todas las herencias que superen esa cuantía, por lo que sólo pagarán el 1%.

Ahora bien, solo serán beneficiarios de la rebaja los grupos I e II de parentesco (padres, hijos y cónyuges), lo cual excluye a otros familiares como podrían ser los tíos, los primos y los sobrinos. Por lo tanto, considerémoslo bien como una “medida insuficiente” o una “cortina de humo” ante los grupos mayoritarios de herederos.

Al respecto, nuestro articulista Ángel Manuel García Carmona sostiene que VOX debería de haber exigido «[la bonificación] al 100% (o al 99’9% si la ley lo impide) del Impuesto de Sucesiones y Donaciones». La idea es acabar con el expolio fiscal sin distinciones, porque no hay derecho a que nadie tenga que legar el fruto de su trabajo a los burócratas de turno.

Mientras, nuestra colaboradora Blanca González de Aguilar recuerda que la cuestión de este tributo «[se ha tratado de una de] las numerosas ocasiones en la que el gobierno español ha dejado de cumplir lo que el Tribunal de Justicia de la UE declara ilegal». Justo lo contrario que cuando se falló en contra de la Doctrina Parot, lo cual supuso la excarcelación de presos etarras como Inés del Río y Bolinaga.

Cambiar las señales de límite de velocidad a 90 km/h ha costado unos 526.000 euros (ABC)

Desde este martes 29 de marzo de 2019 entra en vigor la modificación del artículo 48 del Reglamento General de Circulación, por el que el límite de velocidad en carreteras convencionales se reduce a 90 km/h. Entre 90 y los 300 euros (€) ha rondado el cambio de cada una de las más de 2.700 señales de tráfico.

Unos 526.000 € ha supuesto, aproximadamente, la aplicación de esta medida, que emula a la aplicada en 2011 para reducir a 110 km/h el límite máximo de velocidad en las autovías y autopistas. Pero, ¿qué sentido tienen en realidad estas medidas?

Esto se vende como un intento de “éxito seguro” a la hora de reducir la contaminación, la tasa de accidentes de tráfico y el consumo de combustibles. Pero también sabemos que hay un gran afán recaudatorio en materia vial (por parte del Estado), con la excusa de “corregir a un hatajo de conductores irresponsables”.

Por cierto, como recuerdan nuestros amigos de Navarra Confidencial (NC), hay países en los que los límites de velocidad son meras recomendaciones o normas mucho menos estrictas, y no se da la consecuencia de una elevada tasa de accidentes de tráfico (las carreteras tampoco están en peor estado que muchas de las nuestras).

Las cifras mágicas para entender el absurdo mundo del taxi (Navarra Confidencial)

Según los datos publicados por la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC), el número de licencias de taxi en España durante los últimos 25 años ha bajado de 72.072 a 69.792. En ese mismo período, por el contrario la población española ha pasado de 39,6 millones de habitantes a 46,7.

Además, al hecho de que ahora haya los mismos taxis que en 1994, pero alrededor de 7 millones de españoles más se suma el hecho de que en 1994 nos visitaban anualmente 33 millones de turistas, que ahora son unos 42 millones más.

Al respecto, tampoco cabría duda, en línea con nuestros compañeros, de que «si algún gobierno hubiera propuesto, por ejemplo, ofrecer otras 70.000 licencias de taxis, los taxistas se hubieran lanzado también a la calle [dado que lo que les molesta es la competencia]».

Bruselas quiere eliminar el poder de veto de los países miembros en materia fiscal (Libre Mercado)

La Comisión Europea quiere arrebatar a los países miembros el poder de veto que ostentan en materia fiscal. Si finalmente prospera esta medida, Bruselas podría sacar adelante nuevos tributos comunitarios sin necesidad de contar con el “OK” de todos y cada uno de los veintiocho países miembros.

La iniciativa de la Comisión no fue presentada de manera abierta y transparente, pero el caso es que, para comenzar, se crearían impuestos aplicados a los servicios digitales y a los financieros, aparte de lo que ellos llaman “coordinación” con respecto al Impuesto de Sociedades.

Al respecto, advierte el economista Kai Weiss, que «la Unión Europea tiene puesta la vista en la retirada de mayor soberanía aún a los Estados miembros [ante lo cual] los pequeños Estados [deben mantenerse firmes]».

Continúa este economista alertando de que en el futuro, de salir adelante esto, tan solo bastaría una mayoría cualificada, permitiendo a Bruselas «aliarse con los partidarios de subir los impuestos en países como Francia y Alemania, entre otros, [lo cual le permitiría] finalmente alcanzar su sueño de armonización fiscal».

El Gobierno venezolano devaluó el bolívar al poner en marcha la plataforma Interbanex (EL NACIONAL)

El domingo en la noche, el Banco Central de Venezuela tomó por sorpresa a economistas, analistas financieros, empresarios, operadores y ciudadanos: informó que Interbanex, una plataforma tecnológica de intermediación cambiaria para el sector privado, que empezó a operar el pasado lunes día 28.

La cotización con la que Interbanex inició operaciones fue 52,23% más alta que la del mercado oficial, la cual se ubicó en 2.102 bolívares en la subasta del Sistema de Divisas de Tipo de Cambio Complementario Flotante de Mercado, efectuada ayer. Esto significa que en menos de 12 horas el gobierno devaluó el bolívar un 34,8%.

Esto no es ninguna sorpresa. La moneda estatal venezolana no ha dejado de perder valor respecto a divisas como el dólar y el euro, al mismo tiempo que la inflación monetaria se ha disparado hasta niveles astronómicos (en 2015 ya rondaba un valor del 1200%, según NC), siendo líder mundial en ello.

Como consecuencia, los venezolanos han visto drásticamente reducido su poder adquisitivo. En cualquier caso, esto debería servirnos para hacernos reflexionar sobre los riesgos que conlleva la banca central, en manos del dirigente político de turno.

PGE. El empleo va bien, la productividad, no tanto (Hispanidad)

La secretaria de Estado de Economía, Ana de la Cueva, ha valorado positivamente los datos de la última EPA: la tasa de paro ha bajado al 14,45% y ya hay más de 19,5 millones de ocupados. Por cierto, no ha hecho los cálculos necesarios, pero serían estos: a los 566.200 creados en 2018 se sumarían otros 333.800.

Ahora bien, ante esas cifras, Pedro Sánchez puede “sacar pecho” y vender como “fruto de sus políticas”. Pero los árboles no deben impedirnos ver el bosque. Habrá que ver qué factores han hecho posible esas caídas del desempleo.

Ciertamente, hay síntomas y riesgo de desaceleración económica desde el pasado verano, y los presupuestos de 2019 darán lugar a un nivel de infernalidad fiscal mayor (no les interesa recordar que, con Franco, si, con aquel “dictador enemigo de la libertad de la gente” había, como recuerda Javier Garisoain, menos leyes, impuestos, obligaciones e inspectores de Hacienda).

Pero aún sigue en funcionamiento la “tibia” reforma laboral aprobada en 2012 por el Partido Popular, la cual contribuyó, en cierta medida, a flexibilizar el mercado laboral (las rigideces del mismo son propias de aquellos países con considerables tasas de desempleo o que simplemente no son amigables para los emprendedores).

No obstante, algunos creen que sigue habiendo bastante empleo temporal, como nuestro colaborador José Fermin Garralda Arizcun, y nuestros amigos de NC nos remiten al INE para corroborar que, «lo miremos como lo miremos, con la reforma laboral ha aumentado el empleo y el porcentaje de contratos indefinidos».

Seguiremos informando.

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