Diario de la pandemia. Viernes 27
Viernes, 27 de marzo de 2020
San Ruperto. Beato Francisco Faà de Bruno.
Viernes 4º de Cuaresma. Abstinencia.
Malas noticias
No hagan caso de las estadísticas. El número real de contagiados por COVID-19 es imposible de saber pues depende de las pruebas que se están haciendo. En el caso de España un lote de test defectuosos se vuelve contra el gobierno e inunda de protestas y memes las redes sociales. En general hay muchos infectados asintomáticos que nunca serán diagnosticados. Los sistemas de control cambian de un país al otro. En cuanto al número de fallecidos, que a priori debiera ser más fiable, tampoco sirve. En Francia se ha sabido que no se contabilizan a quienes mueren sin haber sido diagnosticados. Lo mismo ha sucedido en España. En China no se sabe ni se sabrá porque el Partido Comunista es lo que es.
La provincia de Madrid tiene nada menos que 444 liberados sindicales en el sector sanitario. De ellos solamente 133 han pedido reincorporarse para luchar contra la epidemia. Podríamos haber incluido el dato de estos 133 entre las buenas noticias, pero no es buena noticia comprobar la talla moral de los otros 311.
Se busca. El gobierno de Estados Unidos ha puesto en busca y captura al dictador venezolano Maduro. Esta decisión no cambia demasiado la realidad pero es un gesto típico que encona el enfrentamiento.
El Gobierno, empecinado en que hizo bien en autorizar las movilizaciones del 8M. El ministro del interior, Grande-Marlarka, ha afirmado en rueda de prensa que no había razones objetivas para la suspensión. Como saben una Juez de Madrid ha admitido a trámite una denuncia contra el delegado del gobierno en la capital. Además crecen las protestas y el malestar contra esta y otras actuaciones y decisiones del gobierno. Penoso gobierno que no es capaz de mantener la unidad ni transmitir confianza en medio de una crisis sin precedentes.


Buenas noticias
Nos acercamos al pico de la pandemia. Por eso, como ayer, las buenas noticias se resisten a aparecer en los grandes titulares. Sabemos que el trabajo callado de millones de voluntarios, cuidadores, trabajadores sanitarios y de servicios básicos en sí mismo ya es buena noticia. Por otra parte la vida en familia está aportando a la sociedad española multitud de beneficios que se entremezclan con las consecuencias negativas de la crisis. Además, a pesar de tener muchas iglesias cerradas y los sacramentos restringidos… ¿Se está rezando más que nunca en España? Es posible.
Promesas y más promesas de ayuda económica. Todos los organismos internacionales, el G-20, la Eurocámara… prometen ayudas económicas a los perjudicados por la crisis que está generando la pandemia. Veremos en qué se concretan estas promesas. De momento las buenas palabras no faltan. Hoy las bolsas suben.
