El coche eléctrico no arranca
(Por Javier Garisoain) –
Lo del coche eléctrico parece que no cuaja. Las cuentas no salen. ¿De dónde podría salir la electricidad necesaria para mover todo el parque automovilístico actual? ¿De quemar en grandes centrales el mismo petróleo que ahora se va quemando poco a poco en cada coche? Para ese viaje… Y eso sin entrar en otros graves problemas aún no resueltos como son la financiación de unos vehículos caros; los puntos de conexión que resultará difícil o imposible poner al alcance de cualquiera; o hasta el reciclaje de las baterías y otros componentes altamente contaminantes. A corto plazo el vehículo eléctrico podría quedarse en algo así como los cochecitos del golf, un capricho para algunos.
La respuesta de nuestros políticos es la de siempre: la huída hacia adelante. Vender la burra aunque la burra ya lleve un tiempo muerta. Cuando existe un empeño ideológico la realidad es lo de menos. Lo que no saben es que la realidad siempre, siempre, se acaba imponiendo. En este asunto caótico de la movilidad más valdría estudiar los problemas con un poco más de humildad, dejar de lado los tintes electoralistas, dar prioridad a la libertad de las familias y dejar trabajar a los expertos, que los hay.
Un comentario en “El coche eléctrico no arranca”
Ignacio Martí Selva
Buenas tardes,
Es cierto que España y posiblemente el mundo no está preparado para asumir, no ya de golpe, sino que a partir de ahora todos los vehículos que se compraran fueran eléctricos, es decir, nuestras infraestructuras eléctricas no tendrían capacidad para cubrir dicha demanda ni a nivel de transporte de la energía, ni por supuesto a nivel de doméstico, es decir, las instalaciones de garajes privados y públicos no están preparadas para soportar un cargador eléctrico por plaza de aparcamiento y Red Eléctrica Española no tiene vías de transporte suficiente para esa demanda.
Además de ello, efectivamente la generación de la electricidad tiene un componente alto de generación de co2, ya que se genera gracias combustibles fósiles o nucleares cuyas consecuencias son peores que si consumieran en los vehículos de motores tradicionales.
Y por último, no es rápido el establecer una infraestructura que de un servicio público a los coches eléctricos, debemos tener en cuenta que los cargadores ultra o súper rápidos (10 minutos para la carga) tienen un coste aproximado de 1.000.000 euros, siendo la única opción, ya que los cargadores rápidos están en tiempos de 30 minutos, algo impensable para quien tarda 3 minutos en llenar el depósito de gasoil y pagar.
El mensaje oficial no deja de tener un aspecto de concienciación y pedagógico, porque saben que no se puede aplicar ee forma relativamente rápida y eso es lo que les salva.
De hecho, yo que estoy en el sector, que instalo cargadores eléctricos de vehículos, plantas fotovoltaicas y todos lo que tenga que ver con las instalaciones eléctricas de baja-media y alta tensión no creo que el coche eléctrico que triunfe sea parecido al que conocemos hoy…. Me sorprendería.
Reflexiones de un tradicionalista metido a instalador eléctrico.