España tierra de María
María es el nombre de la Madre de Dios, aunque tiene muy distintas advocaciones pues cada pueblo o ciudad, suele usar una diferente. No es extraño que por esto, y por el amor que se tiene desde siempre a la madre de Jesús, se diga que España es tierra de María. Pero hay que ir a los orígenes, del porqué de ese amor de nuestros antepasados, este que ha llegado a nuestros días, a tan buena Madre.
La Virgen María la consideramos todos los buenos católicos, como persona buena, santa, pura, humilde, inmaculada. Pero a pesar de estas buenas cualidades, o virtudes, en las cuales nos quedamos cortos, hay una faceta que muchos descuidamos, que era participe de la sabiduría de Dios, porque era la criatura humana más parecida a Él, por lo tanto no era una ignorante, pues con toda probabilidad leía las Sagradas Escrituras, se puede decir que era una mujer inteligente y bien informada.
La Virgen como madre de la Iglesia y de toda la humanidad, siempre está pendiente, no solo de las cosas importantes que acontecen en el mundo, sino también de lo cotidiano y de lo pequeño, por lo tanto así lo estaría en aquella sociedad judía, en la que vivía y que estaba bajo la dominación romana. Porque su misión ante Dios, ya era interceder, por todas aquellas personas, que le rodeaban. Así mismo después de la muerte y resurrección de su Hijo Jesús, habiendo este partido hacía la casa del Padre, Ella María queda en lugar de su Hijo, siendo participe de las dificultades, de los apóstoles en la predicación del Evangelio.
Aparte de esto cuenta la leyenda, basada en una realidad histórica, sobre lo que aconteció en aquella época en Hispania (España). Se dice que el apóstol Santiago habiéndose despedido, de la madre de Jesús, partió a lo que él conocía como Iberia topónimo griego de España. Y habiendo predicado en las tierras de Astures y Galaicos. Llego a la ciudad de Cesaraugusta (Zaragoza), desaminado por la resistencia en la fe de Cristo, de los nativos en compañía de los ocho nuevos cristianos, quienes se retiraban por la noche a orillas del Ebro, a descansar y hablar con el Señor.
Fue una noche el 2 de Enero del año 40, la Virgen María se apareció, mientras Santiago y sus discípulos se encontraban en oración, escucharon el canto de los ángeles “Ave María Gratia plena” tras ellos venía la Madre de Dios, en carne mortal. Levantado sobre una columna de Jaspe. La Virgen María les pidió que construyeran un templo, en este lugar, el cual prometió que preservaría hasta el final de los tiempos, siendo la fortaleza de la Evangelización, para la conversión de las almas y la vida eterna.
Santiago y los primeros convertidos de la ciudad, edificaron una primitiva capilla, de adobe a orillas del Ebro. Para el Apóstol y los suyos desde este instante ya no fue igual, pues desde allí se salió a Evangelizar, a todas las provincias de Hispania. Esta era una época en la cual Roma dominaba todo el Mediterráneo., como bien decían ellos “Mare Nostrum”. Esto daba lugar a que todos los que vivían y eran ciudadanos romanos en este vasto Imperio, tuvieran posibilidad de viajar con toda libertad, por todos sus dominios, y España e Israel formaban parte de ellos. Por lo tanto España o Hispania, no era ajena para Israel.
Aparte en el libro Sagrado más antiguo del mundo la Biblia, donde se relata la historia de la humanidad, desde los albores de su nacimiento, ya se habla en muchas ocasiones de Tarsis, refiriéndose a la capital de Tartessos. Esta civilización ubicada en el sur de la península Ibérica, es decir lo que hoy es Andalucía, tuvo está un gran esplendor económico y cultural, pues tenía una gran riqueza en recursos naturales, (Agricultura, ganadería, pesca y minería). Estos tuvieron relaciones comerciales con fenicios y griegos, tenían ciudades florecientes, se regían por leyes, conocían la escritura y fue el primer estado organizado de la península Ibérica. Se sabe que los fenicios, eran aliados de los hebreos, y quizás a través de ellos también comerciaron con los habitantes de la península. Se cree que ya en época remota ya había judíos en España y con más motivo ya en la época que nace Jesús ya que Israel ya formaba parte del Imperio romano.
La Sagrada Familia vivía en Nazaret, hay que pensar e imaginar que noticias les llegarían a Jesús a José y a María, de nuestra tierra a través de la gente que viajaba por los dominios de Roma. Quizás en España tendría amigos, familiares o conocidos de su religión y de su raza que vivían en este territorio. ¿Qué noticias tendrían a través de ellos? de los nativos, nuestros antepasados los Iberos y los Celtas. ¿Por qué tuvimos los españoles tanto privilegio?, en que María la Madre de Jesús viniera en carne mortal. Llevada por los ángeles a España. Ella no solo vino a interceder ante Dios, para salvar a sus compatriotas, sino también a los originales de aquí a los españoles.
A pesar de las dificultades de Santiago el Mayor, para predicar el evangelio, en nuestra patria, quizás vio María en aquellos antepasados nuestros, algo que le toco el corazón. ¿Qué cualidades vería la Virgen en las gentes que poblaron nuestra tierra? sin duda mucho defectos pero también muchas virtudes, y es que España cayo en gracia, a la llena de gracia.
He aquí de nosotros que dicen los viajeros que nos visitaron:” Los tartessos, respetaban mucho a los ancianos, eran hospitalarios, y de gran liberalidad, de genio alegre algo que curiosamente encaja con los habitantes de la zona. Los iberos eran un pueblo trabajador, y además buenos luchadores. Celtiberos la humanidad, cortesía y afabilidad, con aire serio y varonil. Los frutos de las cosechas se repartían con igualdad, entre las familias y tanto se daba a los que habían trabajado, como los que habían ganado reposo. La hospitalidad era una característica de los celtiberos. Se esmeraban en honrar a los huéspedes, y extraños, los convidaban a sus casas. Los que les visitaban ofrecianles alojamiento, obsequiaban y eran corteses. También eran guerreros y amantes de la independencia.
Y es que ser cristiano es como una batalla, en un ejército con las armas de la fe, tener valentía no se contradice con ser persona de paz. Fue muy interesante leer en un texto en que Jesús, se rebela a una santa, y le dice que Él se había fijado en los apóstoles, en especial en aquellos que eran pescadores, porque una de sus cualidades es que eran hombres valientes pues estaban a acostumbrados a luchar con el mar embravecido, es decir, que no temían al peligro, hasta dar la vida por su misión, por eso fueron elegidos.
María se fijó en España por sus gentes, personas, de valor que no tenían miedo y que en un futuro llevarían el evangelio, a medio mundo. La Virgen del Pilar tiene mucho que ver con la fe cristiana, de España y de todos los países que tuvo sus dominios. Hoy en día nuestra patria, necesita muchos apóstoles como Santiago, para salvar y evangelizar, de nuevo las tierras españolas. También como Santiago necesitamos a María nuestra Madre, aquella que nos llevara de su mano a conocer a su Hijo Jesús.
Madre si España ha dejado de ser tu tierra, por nuestra falta de fe, yo te pido que la nación española vuelva a ser la tierra, que siempre fue .Tú tierra.
¡España toda tuya María!
MARÍA JOSÉ BOU BERTOMEU