Jose María Zavala habla de ‘Wojtyla: La Investigación”, la película que destapa el secreto para envenenar a Juan Pablo II.
José María Zavala es licenciado en Ciencias de la Información por la Universidad de Navarra. En sus más de treinta años de experiencia profesional ha trabajado en la agencia Europa Press (1986) el diario económico Expansión (responsable de Empresas entre 1988 y 1992), El Mundo (jefe de Información del suplemento económico del fin de semana y responsable de Comunicación 1992- 2000) y Capital (subdirector, 2000-2005), revista promovida en España por el grupo alemán Bertelsmann.
Ha escrito en el periódico británico The Guardian y en la revista francesa Paris Match. Es colaborador del programa “Cuarto Milenio” (Cuatro TV) y escribe cada domingo en “La Razón”. Autor de más de cuarenta libros sobre los Borbones y la Guerra Civil española, es director y guionista de “El Misterio del Padre Pío”, el largometraje documental más visto en la historia del Festival Internacional de Cine Católico de Estados Unidos.
Su última película, “Renacidos”, se convirtió en tan sólo una semana en el documental más visto en España durante 2019 y se estrena a principios de 2020 en Estados Unidos, México y el resto de Latinoamérica, además de Italia, Alemania, Francia o Polonia.
En esta entrevista nos habla de la película ‘Wojtyla: La Investigación”que se estrena el 8 de mayo y se podrá ver en las principales plataformas digitales.
¿Por qué decidió hacer una película sobre Juan Pablo II?
Es un personaje al que guardo un inmenso cariño y con el que me siento muy unido por razones familiares. Juan Pablo II es ante todo el Papa de la familia, el hombre que derrotó al comunismo y un gran santo capaz de seguir ilusionando a una sociedad que ha renegado de Cristo y que sufre en parte las consecuencias de ello. Es también el Papa de la esperanza.
¿Qué supone esta película en su carrera como director?
Me importa un bledo mi carrera como director. Sólo me interesa salvar almas, tocar el corazón de la gente para acercarla a Cristo y llevar esperanza a tantas personas necesitadas de Dios. Porque sin Él, y es mi experiencia personal, es imposible ser feliz de verdad.
¿Por qué el título? ¿Qué es lo que hay que investigar?
Seguir a Cristo hoy y siempre lleva implícita una persecución. Y Wojtyla, como gran santo que es, tampoco se libró de ella. Hemos entrado en los archivos de los servicios secretos comunistas de Polonia y exhumado documentos, fotografías y filmaciones que demuestran el implacable seguimiento que sufrió él desde 1946 y hasta poco antes de su muerte. Destapamos incluso el plan urdido para envenenarle o los sistemas de escucha y vigilancia que instalaron en sus diversas residencias.
¿Qué aporta este documental para conocer mejor al Papa Wojtyla?
Además de la persecución que sufrió por parte del régimen comunista polaco en convivencia con el soviético, Wojtyla padeció también ataques diabólicos y practicó varios exorcismos. Uno de los más grandes exorcistas explica en la película su particular combate con el maligno. La película ofrece también testimonios inéditos y actuales de conversiones y/o curaciones por intercesión de Wojtyla.
¿Cómo ha sido el proceso de preparación e investigación?
Una auténtica carrera de obstáculos desde el primer día. A imagen y semejanza de lo sucedido con “El Misterio del Padre Pío” y “Renacidos”. La ecuación es infalible: a mayores dificultades y sufrimiento, mayor fruto para las almas.
He estado a punto de arrojar la toalla varias veces, pero gracias a Dios no lo he hecho porque la película es un gran instrumento de Wojtyla para acercar almas a Dios.
Rodar una película católica sin apenas dinero y endeudado hasta las cejas, sin un solo euro de ayuda oficial, y terminarla en plena pandemia del Covid-19 es un auténtico milagro audiovisual que no puede explicarse desde un punto de vista exclusivamente humano.
El formato de thriller-documental es muy atractivo…
En mis películas está siempre ausente la figura del narrador. Son los propios entrevistados quienes conducen la historia por donde yo quiero que transcurra y eso le da un ritmo trepidante.
La BSO de la película es espectacular: te eleva el alma y no busca protagonismo, sino que acompaña a la narración, engrandeciéndola.
Me he rodeado también de un equipo de grandes profesionales del cine español: Miguel Gilaberte, académico y director de fotografía (Velvet Colección), el montador Pablo Marchetto (Es por tu bien o Despido procedente), el director de producción Paco Pavón (Un Dios prohibido, Poveda o Red de Libertad), el compositor Javier de la Cruz… Personas que en algunos casos no son religiosas ni practicantes, pero que me han demostrado que son mejores humanamente que algunos fariseos.
Hay cuatro personas claves en la vida de Wojtyla: el cardenal Dziwisz, la doctora Wanda Póltawska, el postulador de su causa, Slawomir Oder; y su mayordomo, ¿se podría decir que son las cuatro grandes columnas del documental?
El cardenal Stanislaw Dziwisz, secretario personal de Juan Pablo II durante casi 40 años, es desde luego un baluarte de la película, como el postulador de la causa de canonización de Wojtyla, Slawomir Oder. Pero también lo son Valentina Alazraki, corresponsal de Televisa en El Vaticano desde hace más de 30 años, que acompañó a Juan Pablo II en sus viajes apostólicos; o Shawn Carney, fundador y presidente del movimiento “40 Días por la vida”. Su participación en la película es también crucial.
Háblenos de la importancia de dar realce a su centenario y ¿cómo esta película puede contribuir a ello?
Valentina Alazraki, la mujer que más sabe hoy sobre el Papa polaco, ha afirmado tras ver “Wojtyla. La Investigación”: “Es la película que faltaba sobre Juan Pablo II”. Y creo que eso es ya decir mucho.
¿Qué ha supuesto la pandemia y cómo va a afectar a su estreno?
No ha sido un impedimento al final, porque la Providencia de Dios actúa cuando se trata de una obra suya. Rodamos en Cracovia, Roma y otras ciudades en diciembre del pasado año.
La víspera del decreto de estado de alarma, terminamos el montaje de la película. Y luego ya hemos podido seguir el proceso desde casa. Íbamos a estrenar la película en cines, pero Dios ha querido que lo hagamos en las principales plataformas digitales para que puedan verla en sus hogares miles de personas que están sufriendo el confinamiento y necesitan el consuelo de la esperanza que esta película les va a transmitir. Hay ya una auténtica avalancha de reservas de la película en la página de la distribuidora European Dreams Factory (www.edreamsfactory.es).