Montejurra. La montaña sagrada. Nueva exposición temporal en el Museo del Carlismo de Estella.
El Museo del Carlismo de Estella acoge desde el pasado 29 de noviembre y hasta el 7 de mayo de 2017 la exposición temporal “Montejurra. La montaña sagrada”, una aproximación a uno de los emblemas geográficos e históricos del carlismo desde la batalla librada en este lugar del 7 al 9 de noviembre de 1873, favorable para el bando carlista. Desde ese momento, Montejurra adquirió una gran significación para el colectivo carlista, dando su nombre a uno de los tercios requetés que se sublevaron contra la Segunda República. Tras la Guerra Civil, por iniciativa de familiares de los excombatientes carlistas, dicho monte albergó la celebración de una romería anual que derivó a partir de la década de 1950 en una de las principales concentraciones sociales y políticas durante la dictadura franquista. “Montejurra. La montaña sagrada” explica, a través de paneles gráficos y piezas museográficas de la propia colección del Museo y de otras cedidas por instituciones y particulares, la azarosa evolución de un movimiento, el carlismo, que fue represaliado por las instituciones gubernamentales, llegándose incluso a ordenar la expulsión de la familia real carlista. Sin omitirse hechos trágicos como los llamados Sucesos de Montejurra, ocurridos el 9 de mayo de 1976 y de los que este año se ha cumplido el 40 aniversario, la exposición propone además una reflexión acerca del sentido y valor que a día de hoy poseen los testimonios del pasado histórico del carlismo.
La muestra está dividida en ocho ámbitos: El espacio simbólico; La batalla. Gesta de héroes; El inicio de la romería del dolor; El resurgimiento; Aires de libertad; ¡Franco traidor, sí, señor; 1976. El partido roto; y La reivindicación de Montejurra.
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Un comentario en “Montejurra. La montaña sagrada. Nueva exposición temporal en el Museo del Carlismo de Estella.”
Porfirio Gorriti
Una reflexión sobre los últimos cincuenta años del carlismo es que ha sufrido la misma afectación en su evolución que el cristianismo occidental en general. La modernidad supuso, para amplias masas sociales, la sustitución de la fe cristiana por un agnosticismo pseudocientífico que idolatra ideologías pseudomarxistas. Otra reflexión cardinal es la estrategia que ha ejercido el nacionalismo vasco para exterminar el arraigado tradicionalismo español que existía en Navarra y las Vascongadas hasta hace apenas tres generaciones.
En la Navarra de hoy, gobernada por el nacionalismo vasco, no sorprende esta iniciativa , supuestamente una exposición cultural . Como tampoco sorprende que se resalte la mañana infernal de Montejurra 76 o que se idolatren montañas.
Según se publica en Ahora Información, la refundada Comunión Tradicionalista participa en la comisión asesora del Museo. Una gran noticia para la auténtica memoria histórica.