Preceptos humanos
(Por Javier Garisoain) –
Respeto que puedas pensar que las vacunas están bien porque tanto ellas como los mensajes oficiales que las respaldan te ofrecen seguridad. Pero ¿de verdad que no te chirría este titular? (El Mundo. 16 de septiembre. “A partir del próximo 15 de octubre será necesario el pasaporte Covid para poder trabajar en Italia”).
Hoy un amigo afirma que se ha vacunado cediendo a las presiones familiares, no por la salud sino por la paz familiar. Otro me ha reconocido que lo ha hecho no por miedo al virus sino por miedo al gobierno. ¿Cuántos más habrá como ellos? ¿No será eso lo que quieren los gobiernos? ¿Un gesto de sumisión? ¿Un trámite burocrático más que les proporcione un nueva vuelta de tuerca en el modelo totalitario chino por el que han apostado?
De todas formas, que exijan el trámite de la vacuna obligatoria poderes mundanos más o menos corruptos; políticos, científicos o periodistas regados con el dinero de empresas farmacéuticas de ética dudosa, entra dentro de lo esperable. Pero que lo exijan autoridades religiosas supone entrar en el terreno pantanoso del fariseismo. Y eso me preocupa bastante más.
Por ejemplo ¿Se puede expulsar a un joven de un seminario diocesano porque no crea necesario vacunarse? Está pasando… ¿Habrá que recordar que lo que hace al hombre puro o impuro no es lo que se inyecta por una aguja sino lo que sale del corazón?
Ojo con este fariseismo que amenaza a la Iglesia, a su libertad y a su misma misión: preceptos humanos como reciclar la basura, o inyectarse una vacuna están siendo elevados a la categoría de mandatos divinos. Y al mismo tiempo, claro, para llenar el vacío y ordenar el desorden, preceptos divinos como no odiar están siendo legislados chapuceramente como delitos civiles. No olviden que el verdadero revolucionario no aspira a quemar los templos sino a tener los suyos propios.
Un comentario en “Preceptos humanos”
Francisco de Sanjuan Barrachina
Acertadísimo el comentario.
Esta es la nueva religión mundana: Ecología, cambio climático, vacunas, calentamiento global, gobierno mundial con los preceptos del hombre mundano, fieles a las doctrinas satánicas. Unos nuevos mandamientos hechos por el hombre, para suplantar los Mandamientos de la Ley de Dios.
La Ley de Dios, conduce a la Paz y al amor.
Estos conducen al desorden, el odio y la guerra.
¡¡¡Satánicos!!!