El otro día en la ”Tv” oí decir a una joven que, muy orgullosamente además, se consideraba ”católica, liberal y de derechas”, creo que por ese orden lo dijo.
Aunque el decir que sea católica ya es, hasta cierto punto, un pequeño éxito y más en la España actual, vamos a ver, porque veo que tiene algo de lío en la cabeza, como le ocurre a una gran parte del ”mundo católico” en nuestros días.
No se puede ser liberal (progresista de izquierdas o conservador de derechas, etc…, esto es un invento de la modernidad) y a la vez católico.
El liberalismo es de raíz masónica y el ”dios” de la masonería es Lucifer, es decir, el enemigo de Dios por si no nos hemos enterado ya. Por eso siempre pregunto lo mismo. ¿Cómo vas a servir a Dios y al enemigo de Dios al mismo tiempo?. Es una cosa cuanto menos, absurda.
La ideología liberal tiene su origen en la logia de turno y Lucifer es inspirador de la masonería y es su ”dios” particular. Esa secta, que es como una ”religión” ya que cuenta con sus propios ritos y como he dicho antes con su propio ”dios”, el príncipe de las tinieblas y de la mentira, además de un ser muy real aunque nos quieran seguir diciendo lo contrario y engañando con cuentos.
Resumiendo. No, no se puede servir a Dios y a la vez a Lucifer. No se puede servir a la luz y a la oscuridad al mismo tiempo. No se puede servir a la verdad y a la mentira a la vez. O eres católico, única religión verdadera dada por Dios al hombre, o eres liberal, ideología de raíz ”herética”. Por lo tanto no hay medias tintas que valgan.